UN DÍA BESTIAL PARA CELEBRAR

Hoy, 4 de octubre, se celebra el Día Mundial de los Animales. Una jornada muy especial para conmemorar la importancia del mundo animal y para darle el valor que se merece. 
                                       

El origen del Día Mundial de los Animales

Hay que retrotraerse en el tiempo hasta las primeras décadas del siglo XX. Y es que fue en el año 1929 cuando, por iniciativa de la Organización Mundial de Protección Animal, se proclamó el Día Mundial de los Animales, en un primer momento, como una manera de sensibilizar y concienciar a la sociedad acerca de la existencia de las especies que se encontraban en peligro de extinción.

No obstante, con el paso del tiempo ese objetivo fue ampliándose de forma contundente. Así, en la actualidad, podemos indicar que lo que se persigue es no solo reivindicar los derechos de los animales sino también el conseguir que exista un trato justo hacia los mismos.

Día para tomar conciencia

Cada año cuando se celebra el Día Mundial de los Animales se pretende concienciar a la sociedad de algún aspecto en concreto relacionado con esos seres vivos. Precisamente este año 2018, Greenpeace ha apostado por dar a conocer que el avance de las construcciones en la costa española está trayendo consigo que en estos momentos haya cinco especies en peligro crítico. Se trata de la focha moruna, el avetoro común, el galápago europeo, el torillo andaluz y la cerceta pardilla.

Así viene a quedar patente en el estudio que ha llevado a cabo bajo el título “Animales desahuciados de la costa por el ladrillo”. Un trabajo que ha realizado en colaboración con el Observatorio de la Sostenibilidad.

Ventajas de que los niños estén en contacto permanente con animales

 los beneficios más significativos podemos destacar los siguientes:

• Desde temprana edad, desarrollan el cariño, el respeto y el amor hacia los animales.
• Las mascotas les pueden ayudar a los menores a expresar y desarrollar sus emociones así como sus habilidades comunicativas y afectivas.
• No menos relevante es que tener una mascota es una manera de que los pequeños aprendan a ser responsables.
• También hay que subrayar el hecho de que tener un animal, jugar con él y cuidar del mismo va a llevar a que el pequeño libere el estrés que pueda sentir. Es más, se considera que ayuda a evitar los riesgos de que ese menor pueda sufrir un depresión.
• Mejora también el estado de ánimo del niño pues el animal le otorga felicidad.
• Se considera que ese vínculo afectivo que se establece entre un menor y un animal es de utilidad para conseguir que el primero mejore su autoestima.